Un lugar tranquilo, con un camarero simpático, agradable y resuelto. La comida rica y bien de precio. ¡Gracias por ese oasis!
Para bajar a los baños termales, hay un camino empinado de cemento que rodea al bar, hacia abajo, situado a la derecha.
Hemos comido de maravilla en este restaurante con buenas vistas!! El personal ha sido muy simpático y además está al lado de la poza termal en la que puedes darte un baño muy rico a 40°
Ambiente muy agradable. Muy bueno el conejo en salsa. El servicio estupendo teniendo en cuenta el número de comensales que había, no paraban de un sitio para otro. La posibilidad de darte un baño en las aguas termales es algo que os aconsejo enormemente.
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