Un pequeño restaurante de cocina moderna que ofrece menú degustación con platos de cocina moderna con identidad propia.
Ambiente tranquilo y decoración un tanto abigarrada que le da un toque muy particular al local.
El servicio lo realizan dos camareras con oficio muy atentas y educadas que presenta los platos y cuentan su historia.
Respecto a la comida poco que decir, lo mejor es ir y probarla.
No esperes encontrar un restaurante tradicional. Aquí trabajan con dos menús: uno con 5 platos salados y postre y otro, con 8 platos salados y postre. Su precio es de 18,50 y 30€ respectivamente.
¿Qué os vais a encontrar? Pues un local con decoración vintage, música excelente y lo más importante, una cocina innovadora, sorprendente, pero sin artificios. Todos los productos son de proximidad (incluso puedes consultar quiénes son sus proveedores). No quiero desvelar la composición de los platos (incluyo fotos) pero no van a defraudaros.
El menú incluye bebida (agua, vino). Aquí, sí discrepo de su filosofía: no se puede cambiar el vino por una caña sin sobrecoste (antes no era así). Si no consumo un producto incluido en el menú, al menos se debería cobrar a un precio especial la cerveza. Por último, mención especial merece la atención de Itxaso. Explica la composición de cada plato con todo detalle y no le falta una amplia sonrisa en todo momento. Además, con una gran profesionalidad en el servicio. ¡Enhorabuena y a seguir en esa línea!
Diego Sagasti (Txasti)
+5
Muy buen sitio para comer algo distinto, con muy bien servicio y no es caro. Volveré. Todo muy rico e interesante.
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