Das erste Mal im La Villa und wir haben uns sofort wohl gefühlt ☺️
Die Herzlichkeit des liebenswürdigen Gastgebers hat uns umgehauen. Er ist mit Herz 💓 und Seele dabei.
Die Beratung des Menüs und der Weine war hervorragend, genau wie das Essen und die Weine selbst 👌🏼🤩
Wir freuen uns auf das nächste Mal im September 🙋🏼♀️
Liebe Grüsse Claudia & Giacomo
La prima volta a La Villa e ci siamo subito sentiti a nostro agio ☺️
Il calore dell'ospite gentile ci ha lasciato senza fiato. Lui è lì con il cuore 💓 e l'anima.
I consigli sul menu e sui vini erano eccellenti, così come il cibo e i vini stessi ??
Non vediamo l'ora che arrivi la prossima volta a settembre 🙋🏼♀️
Cordiali saluti Claudia e Giacomo
La primera vez en La Villa y enseguida nos sentimos cómodos ☺️
La calidez del amable anfitrión nos dejó boquiabiertos. Él está ahí con el corazón 💓 y el alma.
Los consejos sobre el menú y los vinos fueron excelentes, al igual que la comida y los vinos en sí.
Esperamos la próxima vez en septiembre 🙋🏼♀️
Saludos cordiales Claudia y Giacomo
Restaurante acogedor, con buena iluminación. La carta corta pero completa, con una buena variedad de vinos, tanto españoles como italianos. A destacar el tartar de atún marinado en gintonic, con una textura y untuosidad difícil de olvidar. El nivel de la cocina en general espectacular. La relación calidad precio muy buena. El servicio y el trato por parte del personal inmejorable. Un sitio imprescindible en Fuerteventura. Repetiremos!!
Magnífico restaurante en Villaverde regentado por Adriano y Cris, él, en sala, y ella, en la cocina. Dos italianos encantadores entregados absolutamente a hacerte sentir como en casa. Cocina de sabores finos y elegantes, exquisita presentación, máxima calidad de producto. Vinos muy bien elegidos, tanto italianos como españoles. Fuera de carta te ofreceran platos y vinos diferentes (Luis Cañas, Amaren,...)
Tomamos un tartar que nos dejó sin palabras, pasta con mezcla de mar fresquísima y muy bien preparada, salmón magnifico y pescado blanco. Todo sorprendente y con sabores muy conseguidos y regado por un Malvasia de Lanzarote que maridaba perfectamente con los platos a degustar. Para terminar, tarta de chocolate con crema de pera y tarta de queso con frambuesas. Una grapa que gentilmente nos ofreció Adriano, vino a coronar una cena absolutamente redonda.
Tras una calurosa despedida y escuchando siempre de fondo hermosas melodias italianas, dejamos a Adriano y Cris en su bonito restaurante sabiendo que les visitaremos de nuevo muy pronto.
Mil gracias a los dos!
Ha sido un verdadero placer.
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