Restaurante no muy grande y acogedor. Nada más entrar nos recibieron con una cálida bienvenida, y es que el personal es muy atento y servicial. Tienen una cocina pequeña, con lo que hay gran variedad de platos fríos y algunos calientes que no requieren mucha elaboración pero de gran calidad. Éramos 2 y compartimos 2 croquetas de boletus y 2 de jamón que son muy cremosas porque llevan queso en vez de bechamel, 1/2 ración de morcilla (son 4 trozos) y 1/2 reacción de chistorra (7 trozos), la tortilla baby de patata con trufa hecha al momento y estaba muy buena y rematamos con el lingote de txuleta que estaba muy tierno. De postre pedimos una tarta de queso y 1 mantecado Felipe II. También tienen una buena selección de vinos y pedimos un Artigas. En total pagamos 104€. Estuvimos muy a gusto y cenamos muy bien!
Majestuoso local en pleno Pirineo catalán, la decoración del lugar está cuidada hasta el mínimo detalle. Ambiente acogedor y familiar. La carta es todo un acierto, dispone de raciones y de pequeños bocados que deleitan el paladar. Disponen de una buena variedad de vinos y de una plantilla súper profesional, sobre todo cabe destacar el servicio de dos chicos jóvenes que no perdieron detalle en todo momento. Tenemos ganas de volver y poder probar con que nos sorprende la nueva carta. Hacia falta un gastrobar en esta zona. ENHORABUENA!!
Patricia Rodriguez Armas
+5
Lugar súper acogedor en el centro de Vielha. Amabilidad en la atención y buena relación calidad/precio.
Recomendamos:
- Huevo con patatas y Bacon Senen (una explosión de sensaciones)
- tostas de sobrasada, miel y nueces
- croquetas de trufas y de queso
- empanadillas de Laura
- Morcilla
- tortilla de papas y trufa
- tarta de queso
¡Muchísimas gracias!
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