Una suerte que pudimos llevarnos los dos últimos bagels que quedaban, los cuales estaban exquisitos! El bagel era esponjoso y suave por dentro pero crujiente por fuera!
Nuestra nueva panadería de confianza!
La atención es inmejorable, un encanto.
Los productos, geniales en general, pero alguno no da la talla.
Encantado con la caracola, el croissant de pistacho (todos los croissant me gustaron mucho), el muffin crudito, y el hojaldre de queso sobre todo.
El rugelach me dejó indiferente, la empanada rellena de berenjena y garbanzos no me gustó nada, muy falto de sabor y seco.
Llevé dos babka grandes a casa, y bastante mal. Muy secos también... Pero creo que es un caso excepcional, me han prometido que para la próxima estarán perfectos :-)
Volveré para saber si realmente es un sitio bueno, o uno al que merezca la pena ir en cada visita a la ciudad.
Que chulo sitio para un café o postre! Quise un desayuno rápido y Google me guió aquí. Recomiendo el rugelach, es tan bueno! También tienen panes que parecen muy bonitos. Café con leche 10/10.
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