El mejor cordero lechal que probé hasta la fecha. El resto también bien pero más estandar. Estuvimos en la sala de arriba que es amplia y bonita. El servicio impecable. Importante reservar en fin de semana. Apuntado queda para la próxima visita a Toro!
Lo tenía pendiente por ser uno de los restaurantes mejor considerados de la zona. Así que justo el último día de nuestra visita en Toro, decidimos ir a almorzar, no teníamos reserva (se aconseja tenerla) porque puedes encontrarte que esté todo lleno, y es una pena perderse esta cocina. Nos atendió una chica nada más llegar, y afortunadamente, enseguida nos asignó una mesa. Todo estaba delicioso, desde en entrante, unos buñuelos de morcilla y bacalao, como un chuletón de vaca, los postres deliciosos, unas cañas zamoranas, y cremé broulee, y una buena y extensa carta de vinos, unos crianzas de la zona, dignos de probar, y sino tienes otras denominaciones. El servicio, eficiente, amable y rápido.
Un sitio bonito, el personal muy servicial y atento. Unos platos deliciosos. Nosotros pedimos arroz a la Zamorana, cola de toro, cochinillo, cuervo con risotto y de postre un flan casero, helado y copa doña negra.
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