El pueblo ya merece la pena. Alojarse y ver el atardecer ya vale el precio de la estancia. Este restaurante en concreto ofrece platos de gran calidad. No puedo opinar de todo pero lo que comí, carne de cabra, la tortilla con plátano, las croquetas de bacalao y el conejo frito fueron platos de muy buena calidad, en especial la cabra.
Magnifica experiencia, excelente servicio a buen precio. La comida típica del lugar. Pedimos deliciosas berenjenas con miel, queso local ahumado, unas croquetas excepcionales y tortilla canaria que en realidad fue normalita, abundante pero normalita.
Aconsejo el lugar al 100%
Fuimos a este restaurante porque nos lo recomendó el de la tienda de souvenirs y lo agradecidas que le estamos. Tiene la cocina abierta hasta las 5, así que pudimos comer aunque se nos hizo tarde haciendo senderismo. La comida es buenísima. Probamos la tortilla canaria y fue un descubrimiento. También croquetas de espinacas, queso ahumado a la plancha y guiso de cabra. Los postres estaban igualmente buenísimos. Nos gustó sobretodo el bienmesabe. Aparte de la comida, el servicio fue excelente. Nuestro camarero fue muy amable todo el tiempo e incluso nos recomendó lugares que podíamos visitas por la isla. Así da gusto.
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