Hemos parado a tomar una cerveza mientras estábamos de visita en Segovia.
Tiene una buena terraza desde la que se ve un poco el acueducto a lo lejos.
El camarero fue rápido y amable.
Ponen tapa con la consumición.
Decidimos cenar en este bar y fue todo un acierto!!!! El personal es de lo más majo, atento y aportan gran cantidad de frescura al bar.
La comida tenía un buen nombre en carta pero cuando la pruebas...... ESTÁ TODO TREMENDAMENTE BUENO!!!! me daba miedo pedir la tosta de guacamole con salmón por el precio (9€) por si era pequeña o no estaba buena...... volvería a pedirla millones de veces más, el tamaño es el adecuado y el sabor inexplicable de lo bueno que estaba.
Pedimos huevos rotos con jamón, todo un acierto de nuevo, con muuuucha cantidad y lo que es mejor y valoro mucho.. la patata NO es congelada ni de bolsa, sino de "casa". No estaba nada salado ya que el jamón te puede estropear un plato y no fue el caso ❤️.
El cochinillo según mi marido estaba muy muy bueno, venía con sus patatillas iguales a las de los huevos con jamón.
Radler de cañero ✌🏻.
La tarta de chocolate estaba muuuuuy buena!!! La natilla de vainilla debería mejorar algo pero aún así, estaba buena y muuuy muuuy fresquita.
Muy cerca del acueducto, en pleno centro de Segovia, la comida abundante y muy buena, tanto el cochinillo como el cochifrito en su punto y riquísimos, el gazpacho un poco pasado de vinagre para mi gusto, la sepia muy tierna y rica, las croquetas caseras y muy buenas, la carne a la piedra tierna y muy buena, los camareros muy amables, rápidos y eficientes, cuando volvamos a Segovia volveremos seguro
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