Me ha encantado este restaurante. Tanto mi familia como yo salimos muy contentos tanto con la comida como la atención recibida por la camarera y el chef, quien tuvo el detalle de salir a preguntar qué nos había parecido la comida y nos hizo un pequeño postre como regalo. Pedimos diferentes entrantes como el wan tun, los rollitos de primavera, pan chino y la ensalada del chef. Luego pedimos pollo al limón, tiras de ternera caramelizada, pato crocanti y un cerdo al estilo cantonés. De postre pedimos los secretos de fresa, limón y chocolate. Todos los platos estaban deliciosos y la presentación era genial. La decoración del restaurante es muy bonita y los asientos muy cómodos. El precio está muy bien. Pagamos unos 25€ aprox por comensal.
Repetiremos seguro!
Restaurante muy bonito, con buena decoracion y cuidados todos los detalles. Los asientos, a pesar de ser como terciopelo, estan muy limpios y cuidados.
La cocina es vista, lo que le da un punto positivo pues se ve que esta limpia y que el personal toma todas las medidas anticovid.
Tiene una carta amplia y bastante variada. La comida esta buena, la sirven rapido y con raciones correctas.
Conclusion: Un restaurante asiatico diferente, que es digno de ser probado.
Una experiencia perfecta, 1000% recomendado. A pesar de que la comida fuese exquisita, lo mejor de todo fue el trata del servicio. Las camareras fueron muy simpáticas y después de comer nos recibió el chef para saber nuestra opinión además de regalarnos un pequeño postre, comimos en abundancia por un buen precio y disfrutamos de una gran calidad, nos sentimos como su fuésemos magnates en un restaurante de lujo. Como le dije a chef, 10 de 10.
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