Si no vas a propósito te lo pasas, le falta un buen rotulo para saber lo que es, por fuera parece un poco destartalado pero la parada merece mucho la pena.
Tiene una terraza cubierta y otra descubierta además de poder comer en la terraza de la fachada o dentro del establecimiento.
Las raciones son generosas y las carnet espectaculares, pescado no hemos pedido pero lo hemos visto y era muy fresco. La camarera muy agradable.
El servicio maravilloso, cuando pasas igual parece poca cosa, pero la comida está buenísima, costillas, criollos con su salsa casera riquísima, pollo a la brasa que no cuesta comérselo de lo jugoso que está, la lubina expectacular con su sabor a barbacoa, una auténtica delicia, ensalada, morcilla y el postre muy rico.
Un gran acierto el venir aquí, volveremos a repetir.
El servicio buenisimo y muy atentas.
restaurante que está abierto todo el año, precios buenos.
Veníamos buscando una lubina y justo se acabaron (normal,llegamos un poco tarde en el turno). la camarera nos ofreció machote,es un pescado del Cantábrico que nos lo recomendó. Bueno! ese pesado nos ha marcado un antes y después 😂 también pedimos unas croquetas,que estaban como las de la abuela.
la atención es rápida,fluida y Sincera,hay cosas que tienen su tiempo de preparación y siempre lo dicen. Este restaurante se queda en nuestro lista de los más ricos en España que hemos probado.
resumen de comida/cuenta,machote 1 kg con patatas y ensalada,3 Coca-Colas y una ración de croquetas. 65€ un precio muy acorde.
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