Un sitio con muy buen ambiente! Familiar! Un trato genial por su parte y que decir de la comida! Muy rica! La verdad que es un sitio para ir a relajarse y a disfrutar de un muy buen dia!
Estuvimos en pareja tanto en la piscina de agua salada cómo en el Gastrobar. La piscina fue una experiencia curiosa, el hecho de flotar y no hundirte era una sensación de lo más relajante. En cuánto el bar/restaurante, pedimos una tabla de jamón y otra de quesos, todo acompañándolas con unas patatas a laminas con una salsa buenísima. Me quedé con ganas de probar el canelón xxl y los postres pero ya no podíamos más.
Sin duda repetiremos!
Venimos desde Barcelona y la verdad que es una maravilla, nos hemos quedado a comer, la comida se nota que es casera, es espectacular, sin duda vendre más veces.
Y para desconectar y pegarte un buen baño es el sitio ideal, recomendado al 100%
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