Es uno de los restaurantes que están dentro del mercado, en el “Food court” que tiene dentro.
Sorprende enseguida al ver la cantidad de botellas de sake que tiene decorando el local.
El personal es súper amable.
Tienen una forma de servir el sake muy original dejando que se vierta en parte sobre la caja que tiene el vaso alrededor, para luego poder volverlo a echar en el vaso y que haya recogido el sabor de la madera.
Este detalle ya te da una idea de si te vale la pena pagar un euro más por cada uno que te tomas.
Los menús son extremadamente sencillos.
Tienes varias opciones a precios entre 11 y 13 €. Y ya. Sin complicaciones.
La comida estaba especialmente exquisita.
Me pareció mentira encontrarme en un local de estas características en medio de Madrid, dentro de un mercado, y sin que me robasen.
Muy recomendado.
Dueña muy agradable, ramen auténtico , caldo muy rico.
Buena calidad precio
Trato cercano, nos recomendó algunos platos y la comida exquisita. Pedimos platos variados: el pollo empanado con salsa de yuzu, el mix de 10 brochetas y unos california roll de salmón y otros de langostino y todo nos gustó mucho. Los platos no son los típicos que te puedan servir en un japonés normal, tienen un toque distinto y sorprenden para bien. De precio medio, no es excesivamente barato, pero hay muchos japoneses más caros y con peor calidad de comida. Repetiremos.
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