Un sitio al que acudir cuando se tenga mono de carne. Probamos además las empanadas de carne, bastante fieles de sabor, y un variado de chistorra, salchicha y morcilla, muy rico también. La hamburguesa también deliciosa, aunque el pan mejorable. La terraza exterior es muy espaciosa y hay un parque infantil para niños. No es acogedor, pero sí funcional.
Especialidad, como no podía ser de otra forma por su nombre, la parrilla, y al mando un estadounidense con el apellido Bailey. Muy bien hecha la media de churrasco. Muy rico el pisto y las patatas fritas caseras. ¡Qué manía con decorar los postres con siropes! Generosa ración de gazpacho. Enorme local
Siento mucho el tener que haber dado sólo cuatro estrellas a mi valoración, pero debo ser honesto y no puedo dejar pasar por alto lo que nos ha parecido un servicio a veces un poco lento, sobre todo al final.
Las camareras, eso sí son simpatiquísimas, y además son muy profesionales a la hora de hacer sugerencias, al cesar lo que es del césar.
La comida nos ha parecido exquisita, tanto los entrantes como los platos principales.
Las gambas a la crema están deliciosas, las recomiendo encarecidamente.
La carne, churrasco argentino, estaba muy tierna, me ha gustado mucho, quizá un pelín de exceso de sal, pero a parte de eso sin ningún otra pega.
Mi señora se ha pedido pescado y ha quedado también muy satisfecha.
Como han comentado también otros reseñeros la tarta de zanahoria es deliciosa, la hemos pedido los dos.
Os recomiendo que hagáis una visita a este local.
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