Muy buen sitio para tomar café y disfrutar de un ambiente tranquilo y relajado. El café está muy bueno y hay amplia variedad de tés así como dulces caseros que están exquisitos, también sirven desayunos.
No hay servicio de mesas, pides en la barra y recoges tu pedido, así como cuando terminas la costumbre es llevarlo todo a la barra ya que el sitio es pequeño, hay 1 o 2 camareras solamente y hay carteles que lo piden amablemente, las trabajadoras son muy agradables.
Los precios están bien para hoy en día y los dulces caseros merecen la pena probarlos disfrutando de un libro.
Lo recomiendo.
Local de esquina donde han sabido fusionar lo mejor de ambos sectores con buen gusto y adaptándose a un local pequeño pero grande en posibilidades. Toda un experiencia sensorial con la atmósfera que se ha generado en este lugar. Estupendo café y tostadas servido con gran simpatía y amabilidad por las muchachas que atienden. He de suponer que no se admiten libros de la calle😂
Muy agradable lugar. Bonita, pequeñita (parte de su encanto). Perfecta para pasar un rato tomando café y alguna tarta casera, leyendo. Personal muy amable.
Productos de calidad y con precio muy adecuado a lo que ofrecen.
Variedad de libros y otros artículos relacionados para comprar.
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