Nos alojamos 2 personas en régimen de pensión completa, habitación doble con terraza y visitas a la playa.
Las vistas eran espectaculares, recomendamos elegir esta opción pagando un poco más tienes una terraza con vistas al mar.
Nos alojamos en la tercera planta, aunque no había ascensor, pero nos informamos previamente y no nos llevamos ninguna sorpresa.
Una habitación normal, quien quiera un hotel de 5 estrellas que lo pague.
Una habitación acordé al precio.
Respecto a la comida la cantidad estaba bastante bien, lo único destacable de la comida es que no te incluye ningún tipo de bebida en el menú y se debe abonar aparte.
Hostal en primera línea de playa y si llegas pronto hay zonas de aparcamiento gratuito próximas al hostal, nosotros tuvimos suerte ya que la zona es un poco concurrida.
Lo que echamos en falta fue una nevera en la habitación, pero por lo demás bastante satisfechos con el alojamiento.
Desde Ciudad Real a Castell de Ferro se llega bien sin problema dado que la mayor parte es autovía.
Ubicado junto al paseo marítimo de la localidad, el restaurante de este hostal cuenta con salón interior y terraza, y nos ofrece una carta muy variada, en la que predominan los pescados y mariscos, así como dos menús, uno del día, a 12 € y otro especial, a 16 €. Éste incluye alguna opción más, ensalada y bebida, mientras que el primero solo incluye primer y segundo plato, pan y postre. Nosotros optamos por dos menús del día y un menú especial, y entre otros platos pedimos cocktail de gambas con aguacate, chipirones y atún a la plancha. En general, aceptable; no es para tirar cohetes, pero para comer algo cuando se va de paso no está mal. La atención, algo despistadilla, aunque amable.
Se acaban las vacaciones y probamos el menú del día de este restaurante por un buen precio. Yo tomé las alcachofas con jamón y la merluza a la plancha. Ambos platos estaban muy sabrosos. Tuvimos suerte de encontrar mesa en la terraza al ser un sitio de clientela fiel.
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