Muy buena la comida sobretodo la chuleta de vaca, las alubias rojas del menú especial están excelentes, muy bonito el lugar con ambiente rural, el servicio genial (no el servicio del baño ;p) y por último y no menos importante el baño muy limpio con un olor suave a limpieza, lo que más me ha gustado ha sido por obvias razones las servilletas de calidad que son suaves, bonitas y calentitas. Me encantó, y me sigue encantando.
Se puede llamar para reservar. Hay bar, y comedor dentro y en el jardín. Buenas vistas mientras comes. Camareros y cociner@ increíbles, serviciales y la comida DE LUJO. Menú a la carta, especial o Cabuérnigo. Si pides potaje, te preparan para llevar el puchero que sobra.
Íbamos una familia de cinco personas entre ellas tres nin@s, comimos genial, para los niños la comida muy rica ,los postres muy bien elaborados y presentados.
Pd: Fuimos el sábado y estaba lleno, como no teníamos mesa para comer el camarero nos sacó unos pinchos de tortilla muy ricos y abundantes, al día siguiente fuimos ha comer.
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