Éramos clientes de la gestión anterior y ayer hemos vuelto por primera vez después de la reforma. El local ha cambiado por completo, es mucho más elegante, limpio y acogedor. Las chicas son muy simpáticas y atentas y el servicio es rápido. Pero el nuevo menú es decepcionante. Ya no se puede considerar un restaurante sino una hamburgueseria. Lo que hacen la verdad lo hacen muy bien, se nota que todo es casero y de calidad... pero no es lo nuestro. No volveremos.
Todo de la cocina está muy rico. Recomendables las raciones y los menús diarios. Es un poco más caro que otros bares similares pero es un bar muy limpio y con gente amable.
En cuanto al.ambiente la música es buena pero la media de edad es alta en la clientela habitual.
Es para lo que es, café, desayunos o para menús del día. Gente agradable en barra, sitio cómodo e impecables en limpieza.
Muy buena relación cantidad precio. Hemos comido bien y un precio bueno
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