Muy buen restaurante en un lugar privilegiado. Paellas muy buenas y entrantes de calidad.
Gran variedad de comidas.
Vistas al mar increíbles.
A destacar los problemas de aparcamiento, y en verano, prácticamente es imposible aparcar cercar.
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Lo mejor de este sitio es su ubicación : está en un lugar privilegiado. Sobre el mar, con unas vistas espectaculares. El servicio está considerablemente bien y la comida es correcta. He de decir que nunca he comido arroz allí, siempre que voy, pedimos tapas o algún plato para compartir. Las tapas bien. El pan con alioli está bueno (el alioli) aunque he leído en alguna reseña que lo hacen tostado y a nosotros nos sacaron una cesta de pan tal cual. Las bravas merecen una mención especial, son diferentes, corte y fritura diferente y traen la salsa aparte. Además, ración abundante, tanto de patatas como de salsa (que en muchos sitios se suelen quedar cortos de ajoaceite). Los mejillones he de decir que un tanto aceitosos y fríos, con eso no acertaron. Pedimos además unos chipirones rebozados (de nuevo, ración abundante, bien!) y el tartar de atún (demasiado marinado pero correcto). La comida es correcta pero la atención (siempre rápida) y el lugar lo hacen uno de mis restaurantes preferidos de la zona. Soy cliente habitual!
Juan Carlos Brotons Albert
+5
Muy buenas vistas al lado del mar. Por supuesto ésto se paga. Pero tiene buena calidad. Un poco complicado el aparcamiento para coches.
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