Escogimos este restaurante japonés por su menú de 12'5€ y ha sido todo un acierto. La unica pega han sido los baos, que han sido normales. El ramen estaba muy rico, así como el sushi. Los postres no son caseros, pero son razonables por el precio que cuesta el menú. El sitio tiene encanto, los camareros son muy amables y el servicio ha sido súper rápido.
Como buen fan del ramen no dudé en darle la oportunidad al encontrarmelo por casualidad.
Es un pequeño restaurante con una decoración ecléctica, o sea, un poquito de todo, pero a la vez tiene su gracia y le da un rollo izakaya que me gustó.
El menú muy completo: entrante, primero, segundo y postre, con bebida, por 12.50€… precio que ya cuesta encontrar por tal cantidad de comida. Sirven rápido, incluso demasiado (no me había acabado el edamame que ya tenía todo lo demás… este punto no me gustó), pero el ramen estaba muy sabroso.
Volveré para probar el sushi ;)
¿Quedarte lleno por menos de 10€? Sigue leyendo y te lo cuento.
Mi primera vez comiendo ramen y me llevo una experiencia fabulosa.
Sitio pequeño pero fantásticamente decorado, servicio amable y rápido y de la comida mejor ni hablamos.
Un 10/10
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