Elegimos un pack de balneario en pareja y entraba una cena romántica para dos. Era menú cerrado y nosotros no lo elegimos. La cuajada de berenjena estaba espectacular lo mismo decir de la suprema de pollo de corral. Los otros dos simples y escasa comida. El trato de los camareros fue muy bueno, estuvieron muy atentos, también es verdad que sólo estábamos dos parejas cenando. La primera botella de agua entraba en el menú, al igual que una copa de cava acompañando al postre.
Alejandro Hernández Arrabal
+4
Tras un día metidos en el agua, el estómago nos pedía una cena contudente. Fuimos a este restaurante porque nos llamó la atención y lo primero que quiero destacar es el servicio, que fue muy atento. En cuanto a la comida, los huevos rotos con morcilla les faltó hacerse un poco más a las patatas, la hamburguesa esta bien, pero nada reseñable, lo que si que nos sorprendió fue el praliné de verduras, muy rico y disferente.
Después de un día de relax al remojo, buen masaje y sesión de sauna no hay nada mejor que comer bien. No es necesario reservar, siempre hay mesas disponibles, te atienden inmediatamente y con mucha simpatía. Que pena que no quedaban callos de pulpo.. Pero en su lugar pedimos el chuleton y estaba delicioso y con la piedra caliente se puede darle el punto al gusto de cada uno. El asiático de los mejores que he tomado.
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