Hemos llegado 2 personas sin reserva a las 14:00 y en domingo, nos han dejado sentar en una mesa cerquita de la playa y con los pies en la arena. Nos han tratado muy bien y la comida está rica. Hemos tomado calamares a la Andaluza, ensalada de salmón con aguacate y las patatas de la casa oh!nades con all i oli. Volveremos con los pekes des pues de un día de playa.
Un buen lugar para comer al lado del mar. El servicio es muy amable y servicial. Lo que mas nos ha gustado es que los platos los van sirviendo una vez acabas el que te estas comiendo. Asi siempre esta recien cocinados. No comes ninguno frio. El pescado esta muy bueno. Lo mejor para nosotros TIMBAL DE ESCALIVADA I FORMATGE.
Un sitio muy relajante la verdad, a pie de playa y nos atendieron de maravilla, la comida muy buena, super recomendable en Costa Brava!!
El lugar tiene mucho encanto, especialmente en la noche y está perfectamente ubicado. Ese día pedimos para llevar al medio día y todo excelente; después regresamos por cafés y al final decidimos cenar ahí. Mis amigos y yo quedamos muy contentos, todo estaba delicioso, especialmente el pescado del día. Excelente servicio, todos muy amables, desde los camareros hasta el administrador. ¡Volveremos pronto!
Excepcional chiringuito en la mejor ubicación de la playa de Sant Vicenç de Montalt con maravillosas vistas. El que más cerca está del agua. Cocina estupenda con productos de primera calidad, servicio simpático y esmerado, bajo la atenta batuta del dueño Javier que no falta ni un solo día. Si te encanta cenar con los pies en la arena, aquí también es posible. Delante del chiringuito hay cuidadas tumbonas y sombrillas.
Agradable ambiente por su situación sobre la arena playera en el límite entre San Vicente de Montalt y Caldetas. Situado junto a la desembocadura de la riera de Balis el acceso en coche es fácil desde la Nacional II y también desde el paseo marítimo de Caldetas. La carta está bien surtida de pescado destacando las gambas de Arenys de Mar. El servicio es rápido y atento. Un lugar muy adecuado para las cenas de verano en su agradable terraza o para beber algo y tomar tapas o bocadillos directamente sobre la arena de la playa
Birra y chipirones, que mas quieres!! Ambos exquisitos, buen trato por la tarde.
Restaurante muy recomendable, este verano hemos estado comiendo 7 veces, la relación calidad precio es más que correcta, la propuesta de platos es muy variada, y el servicio ha pesar de tener mucha carga de trabajo, es amable y esmerada, el propietario es extremadamente atento en todo!!!
Extraordinario chiringuito. Comida excelente y trato exquisito. El personal de 10 y el gerente muy muy profesional. Buen ambiente y una relación calidad precio bastante eqjilibrida. Sin duda de los fijos en mis visitas al Maresme y a Sant Vicenç de Montalt
Es un chiringuito en la playa con muy buen producto. Donde vas a comerte una ostras y Cava a pie de playa?
Maria del Carmen Ribera Rosanes
+5
Fuimos un grupo de amigos, en total 19 y nos atendieron muy bién. Todos comimos lo mismo pues ya lo habíamos encargado antes de ir. Comimos mejillonrs al vapor, pan con tomate, calamares a la malavueña. De segundo plato fué Rodaball salvaje a la plancha acompañado de verduras, postre . Estuvimos muy bién, pues estás cerca de la arena y puedes ver y oir el mar. Este restaurante usan harinas aptas para CELÍACOS.
THE MAGNIFICIENT EXCESS OF THE SEA... (Ohnades)
Después de recorrer la ruta de los impresionantes edificios modernistas donde se instalaron las delegaciones diplomáticas del Maresme en plena guerra civil española (1938) buscando la seguridad que Barcelona en ese momento no podía proporcionarles llegamos, en Sant Vicenç de Montalt, al que es sin duda el mejor chiringuito de toda la costa de Barcelona y donde descubrimos la excelencia.
Sin pretensiones, sin velas ni misterios, con la sencillez mediterránea que tanto agradecemos quienes hemos pasado buena parte de nuestra vida en las islas, nos felicitamos nada más llegar porque la banda sonora del lugar fuera el MAR, y no el chill deep o la bachata.
Aquí empieza nuestro relato... pero qué mejor que descubrirlo ustedes mismos.
Vayan, siéntense, pidan unas gambitas de cristal o unas pipas de mar, huelan el profundo azul, déjense aconsejar por el capitán de éste barco, quien les conducirá a un rincón confortable, seguro e inolvidable, desde donde contar ya los días que faltan para volver.
Gracias, echaba de menos lugares así.
Quedan pocos ya.
Es un destino muy recurrido en esta época del año , desde que lo descubrimos hace un par de años, no dejamos de ir . El trato es ejemplar, la comida y presentacion de los platos también , es un chiringuito con una calidad mayor que muchos restaurantes . Espectaculares vistas y entorno . Seguiremos repitiendo !!
An error has occurred! Please try again in a few minutes