Un clásico en Olot, lo descubrí cuando vivía allí e intento ir una vez al año.
Hay que ir con tiempo, ya que es un bar muy popular en la zona, una vez allí puedes pedir tanda y anotan tu nombre.
La calidad de los productos que ofrecen es muy buena, y los precios están mas que acorde, es barato ir a comer.
El local es bastante antiguo, pero creo que es su esencia.
Merce sigue haciendo sus cuentas mentales, siempre es un gusto verla.
Gran trabajo el que hacéis, espero volver pronto!
Hacia tiempo que no comíamos en un restaurante de tanta calidad. El sitio es acogedor, no hacen reservas por lo que hay que ir pronto. La comida es excelente y las cantidades son muy generosas. Es cierto que las "patates d'Olot" quizá estaban un poco aceitosas pero estaban muy ricas. También nos pedimos un "entrecot" pero estamos convencidos que por el tamaño era un chuletón. Nos pedimos "mel i mató" de postre y es de los mejores que probamos. El café normal pero nos sorprendió la maxi taza que nos pusieron. Los precios son muy asequibles. Un sitio muy recomendado.
Lo descubrimos por casualidad....
Te apuntan allí,no puedes reservar mesa...
Mercè se acuerda de todo lo que pides...no anota.....
Buena comida y buen precio
Un restaurant tipic i de tota la vida. Una comida casera espectacular y unas raciones enormes. Nos han servido rápido y nos han recomendado genial. Hay que ir temprano o no encuentras sitio.
Elizabeth Sánchez León
+5
El local estaba poco iluminado por fuera y pensábamos que estaba cerrado. Menos mal que entramos porque fue una sorpresa. Ambiente familiar y comida casera.
El postre de la casa espectacular.
Me encantó este restaurante. Ofrece una excelente relación calidad-precio, ración de albóndigas super buenas por solo 3,70 €. Sin duda, lo recomiendo y volveré pronto."
Restaurante de toda la vida excelente trato y mejor comida, aunque tengamos que esperar ya que no reservan vale la pena.
Un encanto de matrimonio, serviciales, simpáticos, comida casera súper buena y económica, si vuelvo a Olot volveremos din duda! La Mercè una gran cuinera
Comida muy auténtica y a un precio super bueno. Quizá tarden un poco en tomar nota y traer la cuenta, pero no merecen menor valoración! 😊
Extra: Debido a la antigüedad del lugar, el baño se encuentra en el piso superior. Es un baño de difícil acceso para personas de movilidad reducida.
Un bar muy acogedor!
La camarera que nos atendió fue una pasada, eramos 5 y fué capaz de memorizar lo de todos sin apuntarlo, nos dejo flipando la verdad.
La comida también es muy buena por el precio que tiene.
Muy recomendable!✨
Javier Ferrer González
+5
18,90€ cena para dos con vino de la casa, postre, comida casera, tomates de huerto con sabor… 🙌🙌🙌
Curioso sitio de los que quedan pocos.
No hacen reservas pero te apuntan en una libreta y te dan una hora aproximada.
Grandes raciones y muy bueno todo lo que probamos.
Un sábado comer hasta artarse por 13€ en el centro de Olot es un lujo.
La pena es que no abren los domingos.
Comimos muy bien. La comida buena la relación calidad-precio excelente y los platos muy grandes. Nos decidimos por este local para comer por las reseñas que tenia y la verdad no nos arrepentimos. Se come por unos 12€ (dos platos, bebida, cafe y postre) por comensal, comida casera, en un local anclado en los años 90. La señora Mercé es una crac, trabajando en el gremio alucinamos con la memoria que tiene la mujer!
Restaurante en el centro de Olot, donde comer mucho, bueno y barato.
La comida es casera, de calidad y en cantidad.
La mujer que atiende las mesas es una crac, toma los pedidos de cabeza, y no te preocupes que no se olvida, y a la hora de cobrarte, te recuerda de cabeza todo lo que has pedido.
Recomendable 100%
Muy muy barato. No hay menú porque te pides dos platos, bebida, pan, cafe y postre y pagas 12 euros. Una locura. Tienes un plato del día regalao de precio pero hay de todo. Patatas de Olot, callos, ensaladas hasta canelones rebozados. No se puede reservar, si hay sitio te sientas. La comida esta buena, no es la mejor de Olot pero cumple. Raciones muy abundantes. Sitio anclado en el tiempo con una camarera de memoria prodigiosa que incluso salió en la tele por ello. No apto para sillas de ruedas, el lavabo es el final boss de la accesibilidad. Es un lugar que si puedes, has de ir. Muy típico y pintoresco. Siempre lleno.
Buenísimo y no se puede decir que sales con hambre porque los platos son una pasada. 100% recomendable y Merce espectacular como recuerda cada pedido de los clientes. Digno de ver. Y un servicio muy bueno. Visitarlo.
Carolina Núñez Gavieiro
+5
Un restaurante de los de siempre, comida casera y muy buenos precios. Muchos trabajadores comiendo allí (eso siempre es bueno!😜). Además, la carta era muy extensa: tapas, platos combinados, platos típicos de la zona, bocadillos, tostadas, postres...
Tardaron un poco en pasarnos a la mesa y en cobrarnos pero merece mucho la pena.
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