Se encuentra en un monasterio, mantiene el ambiente, el comedor esta en la antigua cocina que conserva su chimienea, la mejor carne que he probado en mucho tiempo, no hice fotos a todo porque pense en hacerlas cuando ya me lo habia comido. OJO NO SEGUIR indicaciones de GOOGLE, id a Luna, y luego al monasterio desde alli, si no os manda por un sendero de cabras.
Las vistas desde alli son espectaculares, domina todo el area al ser la unica colina en medio de la llanura.
![5]( "Recensione")
Restaurante regentado por Diego y Cristina que son los anfitriones que cualquier comensal desearía encontrar. Rebosan hospitalidad, cercanía y humildad. Conjuntamente con Lorenzo, aportando un toque de frescura italiana a la cocina, forman un equipo idílico.
El lugar es acogedor y con unas vistas a la comarca de las cinco villas que no pasan desapercibidas. El comedor principal cuenta con una cocina de leña que utilizaban los antiguos monjes que aporta calidez.
Los exteriores tienen una atmósfera medieval que transportan al pasado y permiten alimentar la imaginación, el estómago ya se encargarán de hacerlo Cristina, Diego y el resto del servicio.
La forma de hacerlo es mediante cocina Argentina. Podemos encontrar empanadas, cortes de carne, chimichurri, milanesa, bodega Argentina y toda una selecta variedad de postres, donde el ingrediente principal es el amor y el dulce de leche.
Si lo que están buscando es perderse de la civilización en un entorno repleto de naturaleza y buena comida, no duden: ESTE ES SU SITIO.
No haced caso a google para llegar, hay que ir al pueblo de luna y allí tomar el camino del monasterio, vale muchisimo la pena ir, comida fabulosa a buen precio, vistas y ambiente geniales y el trato espectacular. Una maravilla Argentina en un pueblecito de aragón. No tengo mas fotos de la comida porque no me dió ni tiempo a hacerlas, estaba todo tan rico, que voló.
Restaurante de comida argentina y española muy recomendable por su calidad y precios más que asequibles. Es de destacar la amabilidad y atención de Diego, propietario.
Situado en una colina con vistas excepcionales.
Muy recomendable.
Restaurante reinaugurado instalado en el interior del monasterio. Tiene un salón grande y otro pequeño, muy bonito con chimenea para brasa y unas vistas fantásticas.
La nueva cocina es muy elaborada. Predominan las carnes , principalmente a la brasa , ensaladas y platos con base de queso. Tienen una orientación argentina en los cortes de la carne e italiana, imagino que por su cocinera de ese origen en los quesos.
Si pides mucho te avisan, cosa que se agradece ya que los platos son generosos.
Recomiendo cualquier ensalada, pedimos la de crujiente de pollo, espectacular. Imprescindible pedir empanadilla argentina y croqueta, es inexcusable, aunque sea de postre.
El personal es encantador, para mí es algo muy valorable si como fuera de casa.
Muy recomendable
Creo que han conseguido abrir la hospedería, así que además se puede venir a pasar unos dias
Comimos un grupo de 6 adultos y 2 niños. La comida estaba muy buena, regentado por argentinos, los platos eran estilo argentino. Comedor pequeño, con brasa en el mismo comedor, aunque la comida no se prepara ahí. Pequeña terraza exterior en el claustro del monasterio. Aparcamiento en el exterior. Posibilidad de llegar andando y con coche desde el pueblo de Luna.
Una experiencia inolvidable.
El lugar es único, la atención exclusiva (de ese tipo que casi no queda) y la comida exquisita! Hemos probado las empanadillas, el salmón y las verduras asadas. Es difícil explicar ese toque único que tiene cada plato. Definitivamente volveremos a por más!
Buenísimas las empanadillas, carne de calidad con cortes argentinos y cocinada al punto deseado. Importante hacer mención al chimichurri...
Muy buena atención por parte de los camareros.
A tener en cuenta que de momento no se puede pagar con tarjeta!
Comida buenísima, súper bien de precio, y atención como no la hay. No defrauda, volveremos sin duda. Lo que más me gustó fue el salmón, las croquetas y el cuadril.
Es un lugar encantador, con unas vistas preciosas del Valle.
La atención y la calidad de la comida es inmejorable. Especial mención a las croquetas
Merece la pena hacer una parada.
Un lugar único, exquisita comida con un ambiente muy especial, gracias a todos
Nos ha gustado mucho. Un servicio muy atento, sobre todo Luci, y una cocina con un agradable toque diferente.
Repetiremos sin duda
Un Restaurante para recomendar. Carta y servicios excelente y lo más importante se come de escándalo. Volveremos
Muy bien, almuerzo típico más unas migas para compartir
Genial la comida y el trato recibido. Lo recomiendo
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