Excelente restaurante, deguste el pekin pork el cual es una combinación de sabores únicos, la salsa a base de soja deliciosa, las albóndigas son únicas la salsa es simplemente genial. El ambiente muy agradable, tranquilo y la música muy acorde al sitio y el servicio muy bueno. Sin pensarlo volvería.
Ramón Almendro Hodgson
+5
Un lugar en el que no encontrarás muchos locales. Éramos la única mesa de españoles, sorprendente por la calidad del restaurante. Una carta corta pero muy interesante con comida diferente a lo que puedes encontrar en el resto de restaurantes de Javea. Tampoco es el típico italiano de pizzas y spaghetti. Pocas mesas y un servicio excepcional. Volveremos seguro.
Hemos ido a comer allí, la ensalada Fabrizio muy buena al igual que la burrata, las albóndigas muy buenas, la pasta demoro mucho para salir y el tiramisu era diferente no me gusto. Lo malo del sitio es que no tiene aire acondicionado
descubrimos este sitio por casualidad, paseando por el centro de Xàbia, y como hacemos siempre mirando valoraciones de otros usuarios, y fue todo un descubrimiento, los tres platos espectaculares, el calamar relleno, con una especie de cuscús y tinta negra. Patatas bravas al estilo Fabrizio, las mejores que he probado nunca por sabor y originalidad y la parrillada de verduras, y rematamos con un postre brutal, manzana ahumada (debajo habían ramas de canela braseando) con helado de queso de cabra. Eso con los cafés y una botella de vino blanco, 50 euros (25 por comensal). El cocinero Fabrizio es un fuera de serie. Muy buena relación calidad precio. Volveremos sin dudarlo este verano cuando volvamos a visitar Xàbia y probaremos más platos
Solch ein Geschmackserlebnis ist hier in Javéa schwer zu finden. Egal welches Gericht… einzigartig zubereitet. Der persönliche Kontakt zu Fabrizio…. wunderbar. Er trifft bei seiner Weinauswahl zu seinen Gerichten immer genau ins Grüne. 4-5 mal im Jahr, geht’s ab zu Fabrizio.
(Traducido por Google)
Una experiencia de sabor así es difícil de encontrar aquí en Jávéa. No importa qué plato… preparado de forma única. El contacto personal con Fabrizio... maravilloso. Siempre acierta a la hora de elegir el vino para acompañar sus platos. 4-5 veces al año vamos a Fabrizio.
Comida de autor extraordinaria, con sabores y mezclas buenísimas. Mezcla de sabores curiosa y deliciosos. Las patatas bravas, la focaccia, la sepia con polenta… y los postres de rechupete!
El servicio, con Alba y María, encantadoras.
Un restaurante al que ir, sin duda.
Cocina experimental y muy original, bastante sabrosa, mi favorito los espaguetis con anchoas, me encantaron. Si bien algún otro plato me pareció igual demasiada potente la mezcla. Pero por lo general un sitio genial si quieres probar algo distinto :)
Un menú distinto, con platos novedosos, originales y productos de temporada. La ensalada de Fabrizio es muy completa y te de ha satisfecha. El conejo ahumado es un plato ligero y sabroso. Nos llamó la atención la berenjena caramelizada en un postre.
La comida está muy bien pero no tienen carta, cada día hay unos platos especiales y se elige en base a esa elección que no es muy amplia.
Esta muy bien para la gente que el gusta probar cosas nuevas. Por otra parte el agua que venden es de ósmosis y creo que eso deberían decirlo antes para loa que solo podemos tomar agua mineral. Por lo demás está muy bien y los camareros son muy amables.
Espectacular. Llegamos por casualidad y volvería a ir una y mil veces.
Todos los platos que comimos eran buenísimos, naturales y con una cocina elegante. Comimos el pato al café, la pasta con gamba roja y un risotto de trufa negra. Y de postre el mejor tiramisu que he comido.
Y el trato estupendo! Lastima no vivir cerca para poder ir más a menudo.
Maravilloso restaurante italiano. Los platos salen de lo normal, y aunque la Carta no es muy amplia, absolutamente todo lo que probamos nos sorprendió. De los postres no podéis dejar de probar el tiramisú. Cada euro gastado ha merecido la pena. Volveremos sin duda,
Recalamos por casualidad en este local, pasadas las 15,30 preguntamos si estábamos a tiempo de comer y amablemente nos invitaron a pasar... un acierto! Deliciosas sus albóndigas y la salsa que las acompañaba. La caballa ahumada buenisima también. Mezcla texturas, sabores y una bonita presentación... en definitiva, comida hecha con cariño. Recomendable 100%
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