Buen ambiente motero sin la masificación de otros sitios. Tiene dos terrazas muy cómodas. El trato es estupendo y lo normal es encontrar algún otro amante de las dos ruedas con el que charlar un rato. Nos decidimos por la hamburguesa, grande y riquísima, un punto a su favor es que tienen pan sin gluten. El brownie muy bueno. Con bebida y café 32 €. El trato es fantástico, volveremos seguro.
¡Qué buena experiencia!
Al parecer este asador es muy frecuentado por moteros, y yo lo pude conocer gracias a un familiar que lo descubrió un día que salió a hacer su ruta habitual en moto.
El salón del restaurante me sorprendió, puesto que hay bastante separación entre mesas y, además, muy luminoso. Cuenta con una pequeña terraza en la parte de atrás que, para el verano, debe ser estupenda.
Los chicos que te atienden son muy agradables, y la comida es espectacular!
Pudimos degustar lo siguiente:
- Alitas de pollo: vienen acompañadas de dos salsas muy ricas.
- Entrecot: excelente carne! Te viene 2 grandes porciones para que no te quedes con hambre.
- Hamburguesa ruta 67: muy completa, con bacon y huevo. El sabor de la carne.. ¡Qué bueno!
- Tarta de zanahoria.
En conclusión, considero que trabajan muy bien la carne y utilizan producto de calidad. No escatiman en producto, ya que las raciones son suuuper grandes. Y, además, el precio es muy muy bueno.
Sin duda lo recomiendo!
En nuestro caso aprovechamos el viaje hasta allí para visitar un montón de sitios durante el camino como, por ejemplo, el embalse del Atazar.
Nos encantan las costillas y la ensalada. Los huevos rotos también muy buenos. Comedor con bonitas vistas.
Parada motera obligatoria si pasas por la zona, bonito local y personal realmente agradable. A pesar de que paré muy tarde a comer, me atendieron con una sonrisa y disfruté de una hamburguesa y un café muy buenos. Lo recomiendo y volveré sin duda.
Un Bar muy guapo en un sitio priviligiado donde el hambiente es muy casero y amigable , el dueño un tio muy atento y agradable , ideal para un refrigerio y un buen bocata despues de una biena ruta
Mercedes Romaniega Piñeiro
+5
Restaurante/bar familiar y acogedor. Los propietarios son encantadores. Llegamos agotados de hacer senderismo durante horas y estaba lleno de moteros, no cabía un alma. Aún así nos prepararon un espacio en la entrada, de las mejores cervezas fresquitas de nuestra vida acompañadas de una tapa de increíbles torreznos. Reservaremos otro día para comer en su espectacular terraza trasera. Gracias!
Muy buen bar, asador, con comida casera de alta calidad, trato muy cercano, buena relación calidad precio. Excelentes vistas.
Buen lugar para hacer una parada en ruta. Con terraza exterior y salón interior. Tomamos unas cervezas pero también se puede comer muy bien. Repetiremos.
Buen ambiente y buenos platos en un pueblo precioso tras una serie de curvas espectaculares.
Club Motero Las Jarritas
+5
Parada obligatoria de cualquier ruta motera y no motera que hagas por la zona. Sitio tranquilo para tomar algo y comer bien. El trato por parte de Sergio (el dueño) inmejorable. Buena gente.
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